abril 1 2020
Mamá hasta el final
Carmen Cecilia es madre de seis hijos, tres hombres y tres mujeres. Una de ellas de crianza y a quien, al igual que a los demás, le entrega todo el amor que una madre puede dar. Desde hace cuatro años vive en Tauramena, Casanare, con su esposo, con cuatro de sus hijos, su nieto y un yerno.
Cecilia fue madre a sus 14 años y sabe que el apoyo es necesario para poder salir adelante. Para ella, la familia es la base de su felicidad y como mamá siempre ha estado presente cuando sus hijos más la necesitan. Se define como una guerrera de la vida y tiene las puertas de su casa siempre abiertas para que sus hijos lleguen cuando así lo requieran.
![]()
Ella es consciente de que la vida en familia es un reto, y más cuando son tantos en una casa, “debemos ser amorosos, respetarnos entre sí, darnos mucho cariño y sobre todo tener mucha comprensión”, manifiesta Cecilia. Según ella todo esto lo han reforzado en los espacios que les ha brindado Aldeas Infantiles SOS Colombia y la Fundación Oleoducto Vivo. En ellos, las familias conocen más sobre los derechos de los niños y las niñas, los comportamientos en casa y aprenden de manera divertida, se ríen, hacen ejercicio y aprovechan para compartir sus conocimientos. Es un “espacio diferente donde se nos olvidan los problemas de casa, nos desahogamos y aprendemos de otras experiencias.”
Esta madre y abuela quiere seguir aprendiendo en los talleres del proyecto y reconoce su transformación a partir de este proceso: “Yo he cambiado mucho. Ha sido un cambio muy bonito porque, aunque siempre he estado para mi familia, yo era una persona que gritaba mucho y hablaba fuerte, cualquier cosa me daba malgenio, pero cuando empezamos a participar de los talleres, las profes nos enseñaron muchas cosas y las pusimos en práctica. Todos en casa hemos cambiado.”