Acompañamiento y cuidado de las infancias afro en Colombia  
#ESPECIALDELANIÑEZ —Parte 1: la niñez diversa – abril 13 2022

Acompañamiento y cuidado de las infancias afro en Colombia  

Hoy abrimos nuestro especial de la Niñez con el tema de la niñez diversa. En esta ocasión nos reunimos con Wendy Becerra, coordinadora de servicios del programa de Antioquia, y con Yuly Palomeque, facilitadora del Programa, ellas nos contaron cómo desde el programa se acompaña a la niñez y a las familias, a través desde un enfoque étnico. 

Acompañar a la niñez a través de un enfoque étnico 

Wendy nos cuenta cómo las prácticas pedagógicas al interior del programa se dan para fortalecer las capacidades de las familias y personas que apoyan. Ella resalta que el acompañamiento se brinda a través de distintos enfoques, por ejemplo, el enfoque diferencial que se centra en brindar apoyo reconociendo las particularidades de cada niña, niño, adolescentes y sus familias y según comenta, esto dialoga con un enfoque que reconoce las diferencias a nivel cultural y étnico.  

“No solo reconocemos que como individuo tenemos diferentes formas de percibir y entender el mundo, así como tenemos distintas formar de aprender; sino que también a nivel colectivo, por ejemplo, en un grupo étnico hay creencias particulares y formas de ver el mundo específicas”, es por ello que en el acompañamiento que brinda Aldeas Infantiles SOS es este enfoque para que no se vulneren los derechos de quienes acompañamos. 

Según comenta, Wendy Becerra en el Programa de Antioquia, con presencia en Chocó, se acompañan un 90% de familias afrocolombianas y un 10% de familias indígenas, por lo que en estos procesos el enfoque diferencial es primordial para articular los procesos pedagógicos. Además, resalta cómo dentro de estos procesos se da una revisión documental sobre la cultura, caso sucedido por ejemplo en el acompañamiento que se da a las familias indígenas, Y añade que “a estos procesos se suman también estrategias para el acompañamiento individual y colectivo donde se favorece el diálogo entre culturas, así como el reconocimiento de sus saberes y particularidades”. 

Acompañar y reconocer a las familias diversas 

Frente a este diálogo entre distintos saberes, Wendy menciona la importancia de acompañar a las familias y comunidades para que sus prácticas ancestrales sean reconocidas y que a su vez puedan dialogar con otras prácticas, como explica: “en el tema de la salud tenemos un gran desafío y es sensibilizar, movilizar y transmitir el respeto hacia las prácticas tradicionales de las poblaciones afro e indígenas, así como también reconocer la importancia de que las familias lleven a controles de crecimiento y desarrollo a sus hijos/as, y realicen acciones que faciliten procesos de cuidado”. 

Nos cuenta también que las actividades vivenciales se incorporan al trabajo pedagógico ya que se relaciona con un aspecto cultural: “como afro nos conectamos desde el sentir, desde la música, somos muy verbales, y ello lo tenemos en cuenta para poder hacer acompañamiento. Incluimos, por ejemplo, juegos tradiciones, que incorporamos a los ejercicios de acompañamiento con niños y niñas, o promovemos espacios familiares como la tertulia. Así mismo con la población indígena, conectamos el acompañamiento con su sentir hacia la artesanía, por ejemplo, porque ellos son son muy visuales”. 

“Yo crecí en esta misma orilla donde ustedes crecieron”: el enfoque étnico como parte del acompañamiento 

Yuly Arenas, es facilitadora del programa de Antioquia, y trabaja en el Centro de Desarrollo Familiar en Chocó, ella nos cuenta cómo  integran estas dinámicas al día a día, y cómo, por ejemplo, hay ejercicios donde parten de la reflexión propia sobre el contexto local, “miramos cómo era antes el territorio y hacemos un taller grupal de las familias sobre el derecho a crecer en familia, allí se hablaba de cómo fueron criados y salen reflexiones como: ‘yo crecí en esta misma orilla donde ustedes crecieron (…)en el barrio Avenida Bahía Solano, y aquí todo el mundo se hacía responsable del niño. Una persona mayor podía ser como un tío´, lo que lleva a reconocer a la comunidad como una familia”. Es decir, la familia entendida más allá de los lazos sanguíneos. 

El juego tradicional y los conocimientos en cuidado: herramientas pedagógicas 

La articulación de elementos pedagógicos, con dinámicas de juegos tradicionales, es una forma en la que el equipo pedagógico logra transmitir a las familias distintos elementos sobre el cuidado.  

 

El lobo y la familia, una oportunidad para el aprendizaje. 

En este juego todos los participantes deben crear un solo grupo y buscar la estrategia para permanecer unidos. Las facilitadoras deben hacer cosas para separarlos como, por ejemplo, cosquillas, chistes, poner obstáculos, retos, entre otras. El objetivo es que el grupo no se separe y logre vencer los obstáculos que los facilitadores indiquen.  

Yuly Palomeque, ha desarrollado este y otros juegos tradicionales en el ejercicio de fortalecimiento familiar, su experiencia es que hay muchos grupos que se sueltan ante los obstáculos, mientras que otros se mantienen unidos. “La reflexión al final es que cuando se hacen buenos cimientos la familia no se cae, y que a pesar de muchos obstáculos que se presentan, la familia se mantiene fuerte”. 

También nos contó sobre otra de estas actividades donde a partir del tejido de una colcha o la creación de llaveros se propician momentos en familia y en comunidad, y se genera una reflexión sobre la familia: “La actividad era realizar una colcha de retazos de tela, que iba unida a la reflexión de cómo la familia se construye a través del apoyo y la unidad”. 

Hablar su misma lengua: entender la diversidad dentro del acompañamiento 

Otro de los aspectos que nos cuenta Yuly, es que como programa buscan transmitir y acompañar desde lo local: “aterrizamos al contexto los contenidos técnicos, buscando cosas que le lleguen a las familias”, esto como estrategia pedagógica para explicar a las comunidades conceptos como la protección y la forma de convertirse en una familia que protege. “Hay términos que pueden ser muy alejados o técnicos, y se hace necesario traducirlos al contexto para que las familias y los participantes puedan apropiarlos”, dice Yuly.  

El enfoque diferencial en el acompañamiento familiar es más que un asunto técnico, en Aldeas Infantiles SOS hacemos de la cotidianidad una experiencia que reconoce la diversidad, y esto se evidencia en la forma como el Programa de Antioquia trabaja en el Chocó con población afro e indígena. “Fomentamos la diversidad y apropiación cultural, aquí en Bahía Solano, pensando con los chicos y chicas las palabras que definen la cultura, por ejemplo, canoa, champa y las incorporamos en nuestro lenguaje, así pues, intencionamos las actividades para que ya no se use la expresión ‘el tren de los derechos’ sino ‘la canoa de los derechos’, o también, al retomar juegos típicos como el cacao, el yeimy, el lazo, la lleva”, expresa Yuly. Estas acciones pueden parecer sencillas, pero son determinantes para que, desde el reconocimiento de la diversidad, las familias se conviertan en agentes protectores de la niñez.