El amor de una familia sustituta
#ESPECIALSOS – octubre 1 2020

El amor de una familia sustituta

Especial "Hacia el calor de hogar"

En el marco de este proyecto, en el 2017 se adelanta el proceso de documentación de casos emblemáticos donde hubo pérdida de cuidado parental, con el fin de hacer visibles las situaciones que viven niñas, niños, jóvenes y adolescentes. Estas historias permiten contrastar los entornos que vivieron niños, niñas y adolescentes con escenarios alternativos que los acogieron.

“La casa se rompió”: la necesidad de apoyar a las familias 

JD es el menor de cuatro hermanos, ellos ingresaron al Sistema de Protección, y han pasado por diversos hogares sustitutos. Su caso evidencia la necesidad de apoyar procesos de fortalecimiento familiar para evitar la separación entre hermanos, así como explorar la posibilidad de que los niños y niñas estén con su familia biológica. 

Este ha sido el camino recorrido por estos hermanos: luego de que su padre fallece, cuenta el equipo de Aldeas Infantiles SOS que la madre expresa que no los puede tener, entonces pasan por una medida de restablecimiento de derechos. Un año después vuelven a su red familiar, con una tía paterna; sin embargo, ella no puede asegurar condiciones de desarrollo y protección para los niños. 

Nuevamente los hermanos son ingresados a la medida de restablecimiento familiar. Desde 2015, JD se encuentra en un hogar sustituto, mientras que uno de sus hermanos regresó con su madre y otros dos hermanos están bajo el cuidado de su tía abuela paterna; sin embargo, es notoria la pobreza, violencia familiar y ausencia de normas al interior de este hogar.  

Al pedirle a JD que dibujara a su familia, tomó el color verde y dibujó su casa, sus hermanos, luego exclamó que faltaba su papá y lo pintó, debajo de todos está su mamá y en color violeta colorea a su tía; agrega nubes, un sol y una luna con lo que termina su dibujo. Explica que él está a la entrada de su casa jugando con sus primos, que no aparecen en el dibujo. Cuando se le pregunta si tiene contacto con sus hermanos, dice que se ve con E cuando hacen trabajos de complemento escolar y va a la Fundación. 

De todas estas personas dibujadas dice que no le gusta estar con nadie, solo con su mamá Y, que es su madre sustituta. Al final JD agrega algo más a su dibujo: dos mascotas y la frase “La casa se rompió”. 

Ahora se invita a JD a dibujar una casa que no esté rota, hace un nuevo dibujo en azul, el padre no está, la madre sube en la misma línea donde están ellos, y la tía permanece en la posición inferior dentro del dibujo. 

Acá está mi papá, mi mamá y mi hermano, son mi familia 

Nuevamente, con JD en el Hogar Sustituto, comparte sus objetos personales, sus juguetes, su ropa, sus libros y sus cuadernos. Está alegre y orgulloso de su familia sustituta y de su hogar. 

Cuando JD dibuja donde vive, hace una casa de color café, con color naranja dibuja al papá sustituto, luego un árbol de navidad muy colorido y a su mamá sustituta la representa con un corazón en el pecho, dibuja en una esquina al hermanito menor y a la derecha se dibuja a él mismo, con un corazón en el pecho. “Todos están a fuera de la casa, están a punto de entrar”, dice mostrando las llaves. 

Mientras dibuja va contando que el árbol tiene que colocarse en la sala porque es de navidad, cuenta que el papá sustituto es grande y le gusta porque con su hermanito juegan “pillao”. De su mamá sustituta dice que es buena, que le da frijoles, arroz, carne y jugo de melón. Entonces le coloca un título a su dibujo: “Mi familia”. 

La historia de JD muestra cómo el niño ha establecido un vínculo afectivo con su familia sustituta, y la importancia de su casa como un lugar de protección, esto es lo que ha sentido y lo plasma en su dibujo donde está representado un amor de la madre, un acompañamiento del padre y una relación fraterna con el niño pequeño.  

 

 

Importancia del fortalecimiento familiar 

El caso de JD y sus hermanos, y su entrada al sistema de protección se relaciona con el contexto de pobreza de su familia biológica, esta difícil situación propicia que se generen al interior de la familia dinámicas de violencia y maltrato. Por eso, es importante apoyar a las familias en procesos de fortalecimiento familiar que permitan que sus entornos sean protectores, amorosos y respetuosos. 

También dentro de la historia de estos hermanos, estuvieron ausentes los procesos con la mamá o la familia extensa paterna, que, si bien no garantizaría que los niños fueran acogidos por ellos, si es una oportunidad que debe ser incluida dentro del proceso familiar. 

Otro de los elementos observados es que los hermanos fueron separados y enviados a distintos hogares sustitutos. Si bien JD sintió el calor de hogar y se siente orgulloso de su familia sustituta, es necesario que los procesos de acompañamiento familiar incluyan los puntos anteriores para evitar las separaciones parentales, así como explorar las posibilidades de la familia extensa. 

Si todavía no has leído las anteriores entregas aquí lo puedes hacer. 

Lee la primera entrega de este especial aquí 

Lee la segunda entrega de este especial aquí 

 

Para consultar en detalle este y más casos emblemáticos de niños, niñas, adolescentes y jóvenes que perdieron el cuidado parental y que vivieron un proceso de acogimiento familiar, consulta aquí la “Documentación de casos emblemáticos: niños, niñas y adolescentes en fase de acogimiento e intervención”.